Apuntes
MARIO CÁRDENAS DELGADO (ACPE)
Cuarta Transformación, una farsa
Viernes 16 de Septiembre de 2022 8:16 am
CON la ejecución del sacerdote Miguel Hidalgo y Costilla, perpetrada el 30 de julio de 1811, el gobierno español trató de apagar el fuego libertario que el audaz criollo y otros patriotas había encendido el 16 de septiembre de 1810, impulsados por el anhelo de liberar a nuestro pueblo del yugo extranjero y que los mexicanos tuvieran por fin libertad e igualdad de derechos. La lucha tuvo buen arranque, pero la consumación de la Independencia se dio 11 años después, con la firma del Plan de Iguala. Sin embargo, muchos de los propósitos que animaron la rebelión permanecen incumplidos: más de la mitad de la población de nuestro país sigue esclavizada por las cadenas del hambre, la miseria, la ignorancia, la insalubridad, el desempleo, la carencia de servicios básicos, la inseguridad, la corrupción, la impunidad, el cinismo, el despotismo y las mentiras de los gobernantes, entre otros grilletes. Pese a ello, muchos políticos se desgarrarán hoy las vestiduras y a voz en cuello expresarán monsergas como éstas: el país no se vende, los recursos naturales son y seguirán siendo de los mexicanos; el gobierno cuatroteísta redime de la pobreza y otros lastres a los mexicanos que menos tienen; se acabó la corrupción; ahora no hay tolerancia ni contubernio con el crimen organizado, pero hay que dar a los maleantes abrazos, no balazos, entre otras que evidencian la falsedad de la pretendida Cuarta Transformación. Bueno sería que al margen de discursos y pronunciamientos populistas, todos los servidores públicos y representantes populares trabajaran con honestidad, veracidad, constancia, sensibilidad social, humildad, legalidad y patriotismo, para verdaderamente redimir a millones de mexicanos que debido las dádivas -producto de nuestros impuestos y de los cuantiosos préstamos solicitados a la banca- que les da este régimen, se están acostumbrando a vivir en la miseria, porque así conviene al Presidente, para que lo vean como Mesías Esos compatriotas que López simula salvar con migajas, en realidad siguen esperando que se cumplan el anhelo del cura de Dolores, de que todos los mexicanos tengan buena educación, salud, alimentación, vivienda, seguridad, oportunidades laborales y en fin, a llevar una vida digna, y que por fin ¡Viva México! ¡Muera el mal gobierno!, que haya prosperidad y justicia para los mexicanos, y que se vayan los que mienten, traicionan y roban a los mexicanos con su farsa de transformación. Usted sabe quiénes son. apuntesmario@hotmail.com
