De ayer y de ahora
ROGELIO PORTILLO CEBALLOS
Arreglo de flores
Domingo 15 de Enero de 2023 8:33 am
“CON las flores expresas muchos sentimientos e ideas” me dijo Lolita Vázquez, esposa de mi primo Federico Portillo Cetina, un día de la semana pasada. Había ido a saludarlos al local de su florería de la avenida Camino Real, y ya estando ahí surgió inevitablemente el tema de las flores. “Platícame algo sobre las flores” le pedí a Lolita al tiempo que mi vista descubría una riqueza de formas, colores y fragancias en los claveles, crisantemos, rosas, margaritas, gladiolas y gerberas ahí presentes y que en una primera y rápida mirada logré captar. Ella me comentó: “con las flores expresas amor, ternura, amistad; con ellas no solo agradas, sino agradeces. Te puedo decir que con flores contentas a cualquier persona, además creo que le expresas más sentimientos que con un regalo”. Oye Lolita -le dije y pregunté- ¿pero solo se regala flores a las mujeres? a lo que me respondió: “Bueno, se regala flores a las mujeres que sean pretendidas, novias, esposas o madres. También es frecuente que reciban arreglos florales cuando dan a luz, cuando es su cumpleaños, su graduación o su día social, como a las secretarias. Pero también los hombres pueden recibir flores, por ejemplo, últimamente se están haciendo unos discretos y pequeños arreglos con flores y frutas y se envían a los señores en el día del padre o cuando se encuentran enfermos. Además, hombres y mujeres reciben flores -coronas o ramos- cuando han fallecido”. La plática continuaba y ella me decía: “las flores están presentes en bodas, 15 años, nacimientos, graduaciones y banquetes; nosotros cuando más vendemos es el día de las madres; también el 14 de febrero, día del amor y la amistad, el Día de Muertos y el 12 de diciembre, día de la Virgen de Guadalupe; cuando regalas un ramo de flores es una manera de decir ¡gracias!, de expresar afecto. En un momento de nuestra conversación le hice una pregunta más a fondo sobre el lenguaje de las flores: “¿Qué sentirá una mujer al recibir un ramo de flores?”. Me contestó: “Yo creo que hay emoción, una impresión agradable, un susto bonito. Hemos enviado arreglos florales a oficinas y siempre atraen la atención, y a medida que el mensajero va caminando entre los escritorios, las mujeres suspiran, los hombres manifiestan cierta sorpresa y curiosidad, y mientras el ramo no ha sido entregado, hay suspenso. Cuando llega a su destino, el rostro de la afortunada expresa grata sorpresa al tiempo que la rodean sus compañeras, quienes le preguntan sobre quién se las envió y le manifiestan agrado por la belleza y colorido de las flores. Hay alegría y emoción en el ambiente”. ¿Cuál crees que sea la reina de las flores? le pregunté poco antes de despedirme, a lo que me contestó: “Yo creo que la rosa. Aquí vienen jóvenes o señores que solicitan un ramo de rosas y nos piden que sean rojas” Bueno, el rojo expresa amor, pasión, intenso afecto -comenté- y Lolita remató: “por eso es la flor de los enamorados...” Después de despedirme de Lolita, de mi sobrina Diana y de mi primo, seguí pensando sobre el significado de las flores. Brotaron de mi mente varios pensamientos: las flores nos dicen mucho; juegan un importante papel en nuestra vida; no solo halagan nuestra vista y alegran lo que nos rodea; transmiten afecto, ternura, belleza; acompañan al hombre en fiestas y ceremonias; son elemento de permanente inspiración de poetas y pintores; inyectan ánimo a enfermos y solitarios; son un consuelo en momentos difíciles; encarnan cualidades femeninas como la belleza, la suavidad y la dulzura; simbolizan la pasión amorosa. Bien lo dice la rima de Bécquer: ¿Cómo vive esa rosa, que han prendido junto a tu corazón? Nunca hasta ahora, contemplé en la tierra sobre el volcán la flor. Pero recordemos que no hay rosa sin espinas; el amor es el más grande sentimiento y la mayor virtud, pero no hay amor sin sacrificio.
