Por nuestra memoria histórica
ISAMAR RAMÍREZ
Viernes 27 de Enero de 2023 8:36 am
EN días pasados, durante su conferencia matutina, nuestro presidente Andrés Manuel López Obrador anunció que se conmemorará el próximo 18 de marzo el 85o aniversario de la expropiación petrolera en el zócalo de la Ciudad de México, una fecha histórica en la que todas y todos conmemoramos uno de los actos más patrióticos, valientes y soberanos que cubrieron de gloria al pueblo de México. El presidente Lázaro Cárdenas del Río en el año de 1938 le regresaría a las y los mexicanos el petróleo como recurso energético estratégico que serviría como medio para financiar el progreso y el desarrollo para el país en el futuro. Gracias al petróleo se logró respaldar e impulsar un modelo de crecimiento con el cual se fortalecieron muchas instituciones públicas, escuelas y caminos en México. Poniendo por delante los intereses de la nación, la expropiación petrolera fue uno de los primeros actos de dignidad del país desde la Revolución mexicana para separar el poder económico del poder político, así como reivindicar el poder del Estado como herramienta de las grandes mayorías y sus intereses. Mediante medidas legales y constitucionales, además de un gran respaldo popular, el presidente Cárdenas le pondría fin a la explotación, indiferencia y voracidad de las empresas extranjeras, en su mayoría británicas y estadounidenses, quienes durante años años, cobijadas bajo las leyes y las reglas del porfirismo, se dedicaron a saquear y enajenar los recursos energéticos del suelo mexicano, sin siquiera tener la más mínima intención de retribuir con salarios dignos y justos a sus trabajadores, o en su caso, contribuir a mejorar su entorno social en los alrededores de sus compañías. Con el respaldo moral de millones de mexicanos y mexicanas, y con el dinero del pueblo, se logró indemnizar a las empresas extranjeras, se dio el primer paso a la creación de Petróleos Mexicanos (Pemex) empresa orgullosamente mexicana, y que gracias al esfuerzo y lucha de la 4T se le ha vuelto a dignificar como pilar del desarrollo nacional, a pesar de los retrocesos, decisiones y reformas antipatrioticas como la Reforma Energética de 2013 avalada por el PRIAN e intereses particulares. Hay que recordar que desde hace más de 40 años no se había construido una refinería, prácticamente durante todo el periodo neoliberal. Ahora, con el gobierno de la Transformación, la Refinería de Dos Bocas en Tabasco producirá alrededor de 340 mil barriles diarios, los que sumados a los 250 mil barriles promedio que produce Deer Park, se espera que el próximo año se logre la autosuficiencia en gasolinas y diesel, la ansiada Soberanía Energética. Para todo esto, es importantísimo recordar la expropiación petrolera como un acto de memoria histórica y reivindicación de la lucha por la dignidad nacional.
