Razones

JORGE FERNÁNDEZ MENÉNDEZ
Tráfico de migrantes
Sábado 18 de Noviembre de 2023 9:34 am
II/II En el operativo de la
Sedena se detuvo una banda de secuestradores compuesta por ocho personas, que
durante mucho tiempo operaba con total impunidad en la Gustavo A. Madero,
aparentemente con protección de las autoridades. Los vecinos denunciaron haber
reclamado por las irregularidades que se presentaban en el inmueble que servía
como casa de seguridad, pero la policía local no les hacía caso. En la casa de
seguridad se escuchaban gritos de personas y se veía entrar y salir a mucha
gente de distintas nacionalidades. A partir de trabajos de inteligencia e investigación y
luego de una orden de cateo otorgada por un Juez Federal, integrantes del
Ejercito Mexicano en apoyo a la Unidad Especializada en Investigación de
Delitos en Materia de Secuestro, ubicaron la casa de seguridad y rescataron a
ocho migrantes secuestrados de nacionalidad haitiana. Estaban en condiciones
deplorables: encadenados al piso y con signos de tortura en sus cuerpos. Entre
los secuestrados había cuatro mujeres, incluyendo una niña de diez años de
edad. Los secuestradores abusaban de sus víctimas y
utilizaban a las mujeres en actos forzados de prostitución, sobre todo a
menores de edad a las que drogaban y vendían a sus clientes. Según las
informaciones de inteligencia, los secuestradores pedían a los familiares de
las víctimas entre ocho y nueve mil dólares, amenazando con matarlos o
mutilarlos. Una vez que era pagado el rescate, en algunas ocasiones liberaban a
los hombres, pero a las mujeres las seguían reteniendo para prostituirlas. Según las autoridades federales, el tráfico y la
extorsión a migrantes les deja ganancias a las bandas del crimen organizado de cerca
de 100 millones de dólares mensuales, sin que tengan que invertir dinero y con
menos riesgos que las drogas. Por esa razón, el tráfico y extorsión de personas
ha desplazado en muchas regiones del país al narcomenudeo, pues les deja
mayores beneficios económicos.
Los migrantes haitianos rescatados se
encontraban en pésima situación de salud: sin comer, ni bañarse, encadenados y
golpeados, y fueron puestos bajo el cuidado y protección de la FGR. También los
ocho detenidos están a disposición de autoridades federales. Esta banda, donde
figuraban hombres con edades entre los 18 y los 47 años, fue desarticulada,
pero la pregunta es ¿cuántas células como estás operan en todo el país, bajo el
mando de los principales grupos criminales y con protección de autoridades
locales?