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INNOVEMOS ALGO ¡YA!



MARÍA EUGENIA GONZÁLEZ PEREYRA

Alegría


Viernes 30 de Agosto de 2024 8:28 am


¿Qué otro fin más sencillo y profundo pudiera tener la asistencia a terapia, que encontrar la fórmula de la felicidad? Siempre buscamos esa dicha, anhelamos y nos ilusionamos con ser felices por siempre. Sin embargo, hemos equivocado el camino, insistiendo en buscarla fuera de nosotros, en lo material o en eventos futuros, olvidando mirar hacia adentro.

Un proceso terapéutico es exactamente eso: un camino hacia nuestro interior. Allí nos topamos primero con obstáculos desconocidos: miedos, dolores, traumas, lealtades y creencias que, aunque no siempre malintencionados, nos impiden avanzar.

Ser feliz es, podríamos decir, el proyecto o sentido de la vida. Como nos invita la Biblia: “Dedícate al reino de Dios y su justicia, y todo lo demás te será dado en añadidura”. Reflexionemos: ser dichosos es lo justo y lo sano, y con ello, todo lo demás se vuelve sencillo.

Los niños son profundamente felices sin conciencia. La gracia del adulto es poder elegir, ejercer su libertad para optar cómo ver y procurar lo referente a su vivir, sintiendo una felicidad tan notoria que contagie a otros a seguir sus pasos.

Ese entusiasmo desbordante, ese éxtasis, se puede encontrar cuando nos construimos desde una terapia. Es el camino más sencillo para ser felices incluso en la adversidad. Aprender a reír llorando es una metáfora que nos ayuda a entender que, aunque un día no sea el mejor, siempre podemos optar por reír.

La felicidad no depende de lo que sucede afuera, sino de cómo lo vemos desde nuestro interior. Es una elección consciente, un estado que podemos cultivar independientemente de las circunstancias externas, porque, tú y yo sí podemos crear nuestra alegría.

Innovemos algo ¡ya! Hagamos que cada paso sea dichoso y que la felicidad no sea la meta, sino la constante de nuestra existencia. Emprendamos ese viaje interior, enfrentemos nuestros obstáculos y descubramos la verdadera fuente de alegría que reside en nosotros mismos. Así, no solo transformaremos nuestras vidas, sino que inspiraremos a otros a encontrar su propia felicidad.

Citas y terapia con la autora.

innovemosalgoya@gmail.com