Con los niños, no
EDITORIAL
Martes 03 de Septiembre de 2024 8:18 am
DOS problemáticas sociales atañen a la situación: la
primera refiere al abuso a menores. En México, según registra la Comisión
Ejecutiva de Atención a Víctimas, se cometen 600 mil delitos anuales. De esta
cifra, cuatro de cada 10 víctimas son menores de edad. Es alarmante la realidad
que viven las y los menores, pues aunque a nivel nacional se ha buscado
implementar políticas públicas para hacer posible la pronta denuncia de dichos
casos, muchos de ellos quedan en silencio. La situación que se vive actualmente en el estado de Colima
expone a niñas y niños a diferentes tipos de violencia, por lo que se tiene que
estar cada día más alerta ante manifestaciones irregulares del comportamiento
de los infantes y actuar de manera inmediata en caso de ser testigo de
irregularidades que pudieran indicar abusos a menores, disminuyendo así la
cifra ya mencionada. El abuso refiere generalmente al contacto físico o la
existencia de relaciones sexuales con menores de edad, mas no se limita a ello:
también implica hacer insinuaciones, exhibirse ante ellos, así como producir o
distribuir material de tipo sexual donde se capture a un niño o niña. Ahí radica la segunda problemática. Si el consumo y
propagación de este tipo de material representa ya una acción que atenta al
respeto y al consentimiento, cuyo acceso es lamentablemente fácil, y las
repercusiones tanto en la salud mental como la percepción de la realidad
perpetúan violencia y estereotipos de género, relacionarlo con el tema de las
infancias lo convierte en un agravante que lacera el tejido social y se
encuentra más que penado.
Ciertas acusaciones tuvieron lugar este inicio de semana a
nivel estatal, mas es un hecho incuestionable que las niñas y los niños son un
sector vulnerable de la población y es deber de la sociedad y autoridades en
conjunto garantizar su seguridad ante este y otros actos violentos. Con los
niños, no.