QUOD SCRIPSI, SCRIPSI
HORACIO ARCHUNDIA
Rosi Bayardo: reconstruir el municipio
Lunes 04 de Noviembre de 2024 8:16 am
A la alcaldesa Rosa María Bayardo le tocó emprender una
cruzada de incalculables dimensiones: reconstruir Manzanillo desde sus cenizas.
Y no será nada sencillo, como algunos piensan, por el hecho de que cuenta con
el respaldo presidencial y el de la gubernatura. Levantar un ayuntamiento en
una de las más severas crisis de su historia no es cosa menor. Y si bien debe
concentrar sus esfuerzos en la durísima tarea de rescatar el barco hundido,
también está obligada a hacerles justicia a los manzanillenses, procurando con
energía el castigo inflexible para quienes convirtieron las finanzas públicas
en un botín vulgar. El enriquecimiento de algunos exfuncionarios está a la
vista. Basta con que el Órgano Superior de Auditoría y Fiscalización haga su
trabajo para encontrar el producto del latrocinio en que incurrieron muchos.
Gente que no tenía en qué caerse muerta, salió rica en 6 años. El imperdonable
saqueo no puede quedar impune. Rosi Bayardo está facultada para perseguir, para investigar
cuidadosamente y para disponer acciones legales que sirvan como escarmiento
para los que se aprovecharon del dinero público, y como ejemplo para los que
creen que pueden hacerse de fortuna desde los cargos públicos. Es claro que la alcaldesa no debe desgastarse en pleitos
engorrosos ni en acusaciones al aire. Ella debe dedicar su tiempo a gobernar, a
rescatar el municipio en bancarrota, a gestionar recursos para hacer obras, a
atender las necesidades de los manzanillenses y a trabajar por garantizar la
seguridad de todos. Pero parte de su equipo sí debe encomendarse sin dilación a
investigar los bienes de todos los exfuncionarios y sus familias. No debe
tolerarse el vil bandidaje que cometieron. Cuando los manzanillenses vean que
el gobierno de Rosi Bayardo castiga y corrige las sinvergüenzadas de tantos,
recuperará la confianza y la esperanza, como ha pedido y ha sido el lema de la
presidenta. Abundan elementos para emprender acciones legales y para
recuperar parte de lo mucho que han hurtado no solo en las dos administraciones
de la impresentable Griselda Martínez, sino más allá: en la Capdam, donde
varios funcionarios “se despacharon con la cuchara grande”. Que se hagan
averiguaciones serias que permitan identificar hasta dónde son justificables
las riquezas de muchos y los dineros que se agenciaban pagando, por ejemplo,
aplausos de oscuros personajes que se hacen pasar por periodistas, que además
se convirtieron en calumniadores y detractores de la actual alcaldesa. Solo así, y no de otra forma, los manzanillenses que le
dieron su confianza y que creyeron en ella, reconocerán que al fin se está
haciendo justicia. Rosi Bayardo es una mujer lúcida, con una claridad de ideas
envidiable, con un discurso bien estructurado y congruente, con visión de miras
y con habilidad. Por ello, se entiende que su desempeño en Manzanillo está
siendo bien tejido, perfectamente armado, porque su proyecto político no
terminará aquí: Rosi Bayardo está llamada a continuar, a ir más arriba, a
posicionarse en el ámbito estatal y a crecer en el contexto político regional.
Eso le obliga a cumplirle a Manzanillo y a tomar decisiones sin que le tiemble
la mano.
Por hoy, buen día.