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INDICADOR POLÍTICO



CARLOS RAMÍREZ

Nacionalismo defensivo o integración fallida


Viernes 08 de Noviembre de 2024 8:32 am


El modelo neoliberal del presidente Carlos Salinas de Gortari en la negociación del Tratado de Comercio Libre en 1990-1993 llevó implícita la decisión de Estado de someter-subordinar a México a los intereses estratégicos de la Casa Blanca. La política exterior nacionalista se fue desinflando por el entreguismo de Ernesto Zedillo a la administración Clinton, el panismo timorato de Fox, la Iniciativa Mérida de Calderón y la fragilidad de Peña Nieto. El tratado consolidó el papel sumiso de México a la estrategia de seguridad y geopolítica de Washington.

Obrador pudo lograr una autonomía relativa mínima con un Trump aislacionista y desdeñoso de México, pero con mayor margen de maniobra en la administración relajada, torpe y tibia de Biden.

De todos modos, a mediados de 2019, Obrador tuvo que postrarse ante la amenaza de Trump de imponer aranceles especiales si México no detenía el flujo de caravanas de personas que atravesaban México para tratar de ingresar a EUA.

La fuerza de los principios de política exterior mexicana se basaba en la retórica histórica y constitucional, pero requirió de energía presidencial no solo para eludir frases amenazantes, sino para garantizar la preeminencia de los intereses nacionales en la diplomacia mexicana.

Trump arribará a la Casa Blanca con un proyecto político de fortalecimiento de la hegemonía estadounidense, y por razones de vecindad, será México su prioridad. Los temas los puso en la mesa Trump: migración en modo de contención del flujo y deportación masiva para recuperar el control poblacional; narcotráfico para disminuir el flujo de fentanilo, tomar el control de la comercialización interna y desarticular los cárteles en EUA.

Si el Gobierno de Sheinbaum ajusta su política exterior a las necesidades de Trump, en los hechos habría pocos espacios de entendimiento porque la estrategia del estadounidense no es reconstruir el viejo imperio de dominación de zonas geopolíticas y naciones, sino que se basará en el fortalecimiento interno del poderío americano.

El tema de fricción estará en el principal conflicto entre las dos naciones: la pérdida de control de México y EUA de la línea fronteriza. El crimen organizado en ambos lados de la línea ha creado un espacio de alto riesgo de seguridad nacional para EUA y de corresponsabilidad mexicana.

Trump ya enseñó sus cartas autoritarias, invasivas, amenazantes y violentas, en tanto que Sheinbaum parece que jugará a las escondidillas y abordará de manera aislada tema por tema.

Política para dummies: la política exterior, en efecto, es política interior en estado puro.