¿Cantidad es calidad?
LUNES POLÍTICO
Lunes 25 de Noviembre de 2024 8:28 am
EN el estado, este mes se ha hecho entrega de patrullas a
distintos municipios. Sin embargo, estas cesiones son una parte del trabajo
integral que se lleva a cabo para que las condiciones en las que trabajen las
autoridades les permitan entregar resultados significativos. Las camionetas doble cabina, del tipo que han sido
adjudicadas hasta ahora, son vehículos poco aptos para una persecución, dada su
lentitud y baja maniobrabilidad, lo que ha quedado comprobado con los múltiples
accidentes que los elementos han sufrido a causa de no poder frenar o girar
adecuadamente. Además, las unidades carecen de blindaje, por lo que, en caso de
una agresión, están completamente expuestos incluso ante los disparos de un
arma corta. Por último, las propias armas de los elementos, equipados con
fusiles de la plataforma M4A1, excesivamente largos para operar desde el
interior de un vehículo de forma oportuna. Dejando de lado el armamento y las unidades, los oficiales
siguen sin contar con equipo de contención no letal: taser, gases lacrimógenos
y macanas. Ante un individuo armado con un objeto punzocortante, los elementos
deben elegir entre usar su arma de fuego y arriesgar su libertad por un uso
excesivo de la fuerza (ignorando la regla de Tueller) o arriesgar la vida
deteniendo a alguien que buscará apuñalarlos. Pero hace falta ir más profundo; el entrenamiento de los
elementos no puede sustentarse en disparar una veintena de veces a siluetas
metálicas una vez al año ni esperar que el control de sus emociones sea el
adecuado al enfrentarse a ciudadanos que “conocen sus derechos”. Se debería pensar en la imagen misma del policía. Quizá no
existe una labor más despreciada en nuestro país que la del gendarme, pues
vivimos en una extraña dicotomía, donde queremos que la ley se aplique de forma
rápida y expedita, al tiempo que pedimos “un paro” cuando nos detienen por
pasarnos el alto mientras vamos sin cinturón y respondiendo mensajes. Se tienen avances, pero hoy más que nunca, la
profesionalización de los cuerpos policiacos y su adecuado manejo para lograr
la proximidad social, deben ser punta de lanza para que cuando los niños del
mañana jueguen a “policías y ladrones” no sean más los que quieran emular el
estilo de vida de la novela de protagonistas con acento colombiano fingido que
ven sus padres. Es un paso en la dirección correcta la entrega de
vehículos, pero se debe cuidar que calidad y cantidad vayan de la mano,
haciendo un esfuerzo extra para ver cambios en la cotidianidad del estado. Reforma Judicial a toda costa LA semana pasada fue intensa en materia de declaraciones en
torno a la elección de funcionarios judiciales, pues mientras el Instituto
Nacional Electoral (INE) solicitó una prórroga de 3 meses para la realización
de dichos comicios, el Congreso de la Unión dejó poco margen a tal solicitud y
señalaron que se deben respetar los tiempos constitucionales. El órgano electoral argumenta que las etapas organizativas
de la elección de jueces, magistrados y ministros se retrasaron al menos 2
meses debido a los litigios jurisdiccionales que siguieron a la aprobación de
la reforma, por lo que ya están muy justos los tiempos. No obstante, el oficialismo, a través del presidente del
Senado, Gerardo Fernández Noroña; así como del coordinador de Morena en la
Cámara de Diputados, Ricardo Monreal Ávila, ha mostrado una postura inflexible.
Tal parece que la instrucción es aplicar la reforma a toda costa, aun cuando la
preparación de los comicios está sumida en la incertidumbre. A lo anterior se añade que, desde el pasado martes, Claudia
Sheinbaum envió al Congreso de la Unión las disposiciones secundarias que
complementan la reforma constitucional aprobada hace semanas. El inicio de un nuevo proceso en la Cámara de Diputados,
esta vez para la expedición de leyes secundarias que otorguen viabilidad a la
Reforma Judicial, muestra que desde el régimen de la 4T no existe ningún margen
para negociaciones; aunque en realidad nunca existió la intención de llegar a
consensos y mucho menos ceder algo frente a los críticos del nuevo entramado
judicial. Justo en esa unilateralidad radica el riesgo, pues la
aplastante mayoría de Morena y sus aliados modifican el panorama institucional
del país con base exclusivamente en sus postulados y dogmas, sin tomar en
cuenta la pluralidad que existe en México, sin la necesaria discusión en las
múltiples regiones que conforman la geografía nacional. ¿Están capacitados los actuales senadores y diputados, en
este caso los del régimen morenista, para esta profunda modificación de la vida
institucional en México?, ¿tienen la estatura suficiente para diseñar un
esquema jurídico que responda a las necesidades de los millones de habitantes
en México?, ¿cuentan con la capacidad que tuvo, por ejemplo, la generación
juarista, para refundar al país con un nuevo edificio democrático? La autodenominada 4T ha decidido que el voto popular es
suficiente para legitimar su autocrático proceder en rubros delicados como la
administración de la justicia, la seguridad pública, la transparencia y
rendición de cuentas, el petróleo y la industria eléctrica. Lo deseable es que
esta generación de autoproclamados reformadores no lleve al país al
despeñadero. Organismos autónomos EN lo teórico, los organismos autónomos son instituciones
cuyo rasgo distintivo debe ser la independencia funcional respecto a los tres
Poderes de la Unión, es decir, deben ser capaces de tomar decisiones y llevar a
cabo sus funciones sin estar directamente subordinados a ningún Poder. Son clave para el funcionamiento de una democracia. Al ser
independientes y tener funciones específicas, garantizan que los derechos de
las personas sean respetados y que el poder esté distribuido de manera
equilibrada. El argumento para su desaparición desde la perspectiva
oficial es la corrupción, que dicen, se expande en muchas instituciones. Con
base en ese discurso, México ahora presencia cómo la desaparición de los
organismos autónomos se aprueba en las tribunas. La idea no es nueva. Durante el sexenio anterior, se
insistió hasta el cansancio hacer realidad tal premisa. No tuvo éxito deseado
porque aún existía un factor de peso en contra del Ejecutivo: el oficialismo no
contaba con la mayoría calificada en el Congreso para eliminarlos. En diciembre de 2023, durante una conferencia matutina, se
anunció que se enviaría una iniciativa de ley al Congreso para eliminar
organismos entre los que destacaban la Comisión Federal de Competencia
Económica (Cofece), la Comisión Nacional de Evaluación de la Política de
Desarrollo Social (Coneval), el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) y
el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de
Datos Personales (INAI). A los motivos de la decisión, además de corrupción y
falta de transparencia, se añadió la austeridad, asegurando que se ahorrarían
100 mil millones de pesos al año con su eliminación. Actualmente, su postura es la misma, pero sus números, no:
Morena y aliados cuentan con la mayoría calificada, y ya fue aprobada en la
Cámara de Diputados la desaparición de los organismos autónomos. No sería
extraño que esta reforma tomara la misma velocidad que las anteriores hacia la
total aprobación. El visto bueno decisivo es inminente. Sin embargo, aún se
siguen cuestionando las formas. Si la política mexicana fuera un partido de
futbol, las organizaciones autónomas jugarían el rol del árbitro. Si el árbitro
es sospechoso de acciones ilícitas, se sanciona o se reforma, mas no se juega
sin él. El oficialismo alega los mismos motivos por los que ven
prudente la eliminación, pero algo no concuerda. ¿De verdad es más grande el
problema que las capacidades de la mayoría en los tres Poderes, que prefieren
ir por el llano camino de la desaparición o son otros sus motivos? Si
eliminaran cada institución infectada por la corrupción en México, sería un
país totalmente mutilado. ¿Escalada o acuerdo de paz? EL conflicto armado entre Ucrania y Rusia, iniciado en
febrero de 2022 con la invasión rusa, alcanzó una nueva fase de escalada tras
mil días de guerra, marcada por acciones bélicas inéditas, tensiones
internacionales y movimientos políticos significativos. La semana pasada, Ucrania atacó instalaciones militares
dentro del territorio ruso utilizando misiles de largo alcance ATACMS
proporcionados por EUA, marcando un cambio significativo en su estrategia
militar. Estos misiles alcanzaron objetivos en las provincias de Bryansk y
Kursk. En respuesta, Rusia utilizó un misil hipersónico de última
generación, el Oréshnik, contra una fábrica en Dnipró, Ucrania. Además, Putin
firmó cambios en la doctrina nuclear rusa, permitiendo el uso de armas
nucleares contra países sin arsenal nuclear que reciban apoyo militar de
potencias nucleares. El apoyo externo y las alianzas entre ambos mandos no se
han hecho esperar. Antes de la escalada, Rusia estrechó sus lazos con Corea del
Norte, recibiendo misiles, artillería y tropas norcoreanas a cambio de petróleo
y bienes. La presencia de más de 10 mil soldados norcoreanos en Rusia alarmó a
EUA y aliados. Ucrania continúa recibiendo respaldo militar y económico de
Occidente, aunque enfrenta incertidumbre sobre el futuro apoyo de EUA con la
inminente llegada de Donald Trump a la Presidencia. Joe Biden permitió a Ucrania utilizar armas de largo
alcance contra Rusia poco antes de que Trump asuma el poder, consolidando el
apoyo estadounidense a Kiev y dificultando posibles recortes en la ayuda
militar bajo la próxima administración. Trump, crítico de los costos asociados al apoyo a Ucrania,
prometió poner fin rápidamente al conflicto, aunque no precisó cómo. Este
domingo, el futuro asesor de seguridad de la Casa Blanca, Mike Waltz, dio a
conocer que el equipo del expresidente republicano trabajará con la
administración saliente para explorar un posible acuerdo de paz. Putin expresó disposición para negociar un alto el fuego
con Trump, aunque mantiene su exigencia de que Ucrania renuncie a unirse a la
OTAN. Las condiciones propuestas por Rusia, como la permanencia de los
territorios anexados, son inaceptables para Ucrania, que exige el respeto a sus
fronteras de 1991. Las tensiones aumentan ante el temor de una escalada mayor,
con cierres de embajadas occidentales en Kiev y advertencias de ambos bandos.
En las próximas semanas, se espera que las posiciones
internacionales y las negociaciones posibles definan el curso de un conflicto
que, por ahora, parece lejos de resolverse.