Cargando



Ámame, pero déjame vivir



RUTH HOLTZ*


Viernes 14 de Febrero de 2025 7:55 am


EL hecho de amar parece ser la justificación para considerar que una persona hace lo correcto. Pero no siempre las personas saben amar sanamente. Hay personas que pueden centrar absolutamente sus vidas en amar a alguien, al grado de olvidarse de sí. Y no es precisamente amor lo que experimentan, sino una necesidad inaplazable de “colgarse” de alguien que les dé aquello de lo que carecen: “amor a sí mismas”, seguridad, sentido a su existencia y adormecer su dolor frente a la soledad.

Ser amado parecería una bendición, pero serlo de una forma tan abrumadora que atrapa al otro, que lo obliga a ser de un cierto modo si no se enfrenta a los reclamos o las tormentas emocionales de quien le ama. En suma, pagar el precio de ese amor sale ciertamente muy caro. Es un amor posesivo, de personas adictas a amar a alguien y así encontrar una forma de amarse a sí mismas por intermedio de la aceptación y el cariño de otro que les compruebe que no son tan malas personas.

Amar y ser amado no es todo en la vida. Además de amar, la persona ha de tener una vida propia, sus objetivos y metas bien consolidados. Para estar en posibilidades de amar maduramente es necesario que ser responsables de nosotros mismos, de tal manera que lo que se dé sea amar y no un trueque “te cuido a cambio de que me cuides”, “te amo pero eres un tal por cual si no me amas como yo quiero”, “protégeme, a cambio yo te amo, pero no me dejes que me muero”, etc.

Un amor así generalmente esconde miedo, antecedentes de abandono, de carencia de afecto en su infancia, de parejas que le rompieron el corazón, en fin, historias de desamor. Y entonces una persona con estos problemas se vuelve aprehensiva con quien le ama ya quien ama. Hay gente sin vida propia, sin satisfacciones personales que pretenden llenar todas sus necesidades con una persona, cuando eso sería destructivo para ambas partes. Podemos concluir que quienes “aman” así han desarrollado una especie de adicción a amar a alguien, pues presentan los mismos síntomas de un adicto a una sustancia, con incluso los problemas derivados del síndrome de abstinencia. En estos casos es necesario acudir a psicoterapia para superar su codependencia y adicción. Si padeces esto requiere generar tus propios recursos emocionales, mentales e incluso económicos para hacerte responsables de ti mismo y no esperar quien te ame lo haga en nombre del amor. Quien te ama quiere que crezcas, no que dependas.

 

*Psicoterapeuta.

312 330 72 54 / 312 154 19 40

 biopsico@yahoo.com.mx