INDICADOR POLÍTICO AMLO y Adán

CARLOS RAMÍREZ
contaminaron agenda
Jueves 02 de Octubre de 2025 9:05 am
INDICADOR POLÍTICO AMLO y Adán contaminaron agenda CARLOS RAMÍREZ LA errática estrategia de comunicación social de Palacio Nacional y las indecisiones para gestionar la agenda presidencial, siguen empañando el caso del senador morenista Adán Augusto López Hernández y sumándole el apoyo abierto del presidente emérito Andrés Manuel López Obrador. Todo esto afecta a la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, quien debería tener el espacio mediático exclusivo para fijar su propia agenda presidencial. Lo que persiste en este escenario político inestable es la percepción de que la agenda política del presidente emérito está contaminando la de la presidenta en funciones. Las ambigüedades gubernamentales respecto a la corrupción, las investigaciones y las amenazas de que no habrá impunidad, están restando espacio político vital a las prioridades de Palacio Nacional. El caso del senador Adán Augusto estalló en la sociedad mediática y política, ocupando los titulares de la prensa crítica y acaparando la conversación digital. Sin embargo, la circunstancia agravante es que no fue una iniciativa del gobierno de la presidenta Sheinbaum, sino una consecuencia de una filtración en EU sobre los problemas del huachicol gasolinero y fiscal. Por su parte, la respuesta gubernamental fue ambigua. Palacio Nacional, sus oficinas políticas y hacendarias se movieron con excesivo cuidado para no mandar mensajes equivocados al Palacio de Invierno de Palenque. Sin embargo, en el ambiente político mediático del círculo rojo, surgieron indicios que pudieron interpretarse como si “algo” se estuviera cocinando. Esto alimentó la percepción de que podría haber un deslindamiento entre los dos sexenios, debido al supuesto interés presidencial de recuperar para su agenda las posiciones privilegiadas en las coordinaciones de diputados y senadores, además del control del partido Morena, que actualmente está en manos del presidente emérito. El problema es que las ambigüedades han servido para que la conversación mediática enfatice un supuesto enfrentamiento entre presidenta y presidente, lo que podría debilitar políticamente a la 4T, justo cuando se debe asegurar la mayoría calificada en la Cámara de Diputados y retener las gubernaturas morenistas en disputa. Además, se busca arrebatar al PAN, PRI, Verde y Movimiento Ciudadano sus enclaves locales. El punto de inflexión que debía haber puesto fin al caso del senador Adán Augusto ya pasó, pero el tema sigue creciendo debido a la falta de habilidad en la comunicación política de Palacio Nacional y, sobre todo, por las preocupaciones del presidente emérito. Insistir en la relación Adán Augusto Hernán Bermúdez está siendo alimentado desde EU y las oficinas interesadas en el tema que obsesiona al presidente Trump: el crimen organizado en México dentro del aparato político del Estado. Los mensajes de la presidenta y de la secretaria de Gobernación, afirmando que no habrá impunidad y que pronto se darán a conocer noticias judiciales sobre los presuntos responsables del caso “La Barredora”, el huachicol gasolinero y fiscal, solo alimentan la conversación digital y las expectativas de sorpresas penales contra el senador López Hernández. Esto podría obligar a un reacomodo político de poder y lealtades entre Palacio Nacional y el Palacio de Invierno de Palenque, siempre en un clima de expectativas negativas. Lo que se haga después del inicio del segundo año de gobierno, con miras al mitin de celebración del próximo domingo, tendrá mayores costos políticos si no se toma ya la decisión de sobreseer el caso Adán Augusto o de liberar los procedimientos judiciales, lo que podría causar estragos dentro de Morena y del grupo de López Obrador. Política para dummies: hay momentos en que la comunicación determina la política.